Сómo garantizar la seguridad de los pacientes

La seguridad de los pacientes y las buenas prácticas se centran en garantizar la protección y el bienestar de los pacientes. Al seguir protocolos y prácticas seguras, se reduce el riesgo de errores médicos, lesiones o daños innecesarios durante la atención médica. Esto es especialmente importante en entornos médicos donde los pacientes están expuestos a procedimientos invasivos, medicamentos potentes y otros riesgos asociados.

¿Qué es la información sobre seguridad de los pacientes?

La información sobre la cultura de seguridad se introduce para notificar reacciones adversas o cualquier otro dato de seguridad a las autoridades reguladoras, los profesionales sanitarios y los pacientes. La información sobre seguridad tiene los siguientes objetivos:

prevenir la aparición de reacciones adversas en los pacientes;

proporcionar información oportuna y basada en pruebas sobre el uso seguro y eficaz de los medicamentos y la gestión clínica adecuada del tratamiento de un paciente

promover cambios en la práctica médica (incluida la automedicación) cuando proceda

cambiar actitudes, decisiones y comportamientos sobre el uso de los medicamentos

cambiar actitudes, decisiones y comportamientos sobre procesos asistenciales

apoyar comportamientos que minimicen los riesgos

fomentar la toma de decisiones informadas sobre el uso racional de los medicamentos

garantizar atención segura

La información sobre seguridad es una responsabilidad de salud pública necesaria para alcanzar los objetivos de la farmacovigilancia y promover un uso racional, seguro y eficaz de los medicamentos, prevenir los daños derivados de las reacciones adversas a los medicamentos y contribuir a la protección de los pacientes y la salud pública.

La información sobre seguridad es una herramienta clave para prevenir las reacciones adversas a los medicamentos. Contiene recomendaciones para una gestión clínica adecuada del paciente.

La información sobre seguridad del paciente también puede:

  • aumentar la protección social
  •  influir en la actitud del paciente hacia determinados medicamentos
  • ayudar a prevenir posibles efectos secundarios
  • mejorar procesos de atención a los pacientes
  • reducir los errores de prescripción
  • informar a los pacientes sobre el uso seguro de los medicamentos prescritos.

¿Cómo se comunica la nueva información sobre seguridad?

Cuando se identifica un nuevo problema de seguridad para un medicamento, se informa durante la auditoria. Se actualiza la información de seguridad que figura en el prospecto y en el resumen del medicamento para evitar la ocurrencia de eventos adversos. Dependiendo de la gravedad de la nueva información de seguridad, se pueden considerar diferentes canales de información. Entre ellos se incluyen, aunque no exclusivamente, los siguientes canales.

Comunicación directa a los profesionales sanitarios (DHPC, direct communication to healthcare professionals) por parte del solicitante de registro o de las autoridades nacionales competentes.

Publicación de documentos redactados en un lenguaje sencillo (por ejemplo, en formato de una lista de chequeo) para ayudar a los pacientes y al público en general a comprender las pruebas científicas y las acciones reguladoras en relación con un problema de seguridad.

Comunicación con la prensa, incluidos comunicados de prensa y sesiones informativas dirigidas principalmente a periodistas. Los periodistas son un medio importante para llegar a un público más amplio. Sin embargo, cuando además se informe directamente a profesionales sanitarios cualificados, se les deberá informar antes o al mismo tiempo que la comunicación a la prensa.

Sitios web de las autoridades nacionales competentes y de los solicitantes de registro que puedan ofrecer información fácilmente accesible y comprensible.

Otras comunicaciones a través de Internet, por ejemplo, redes sociales.

Paquetes instruccionales, boletines y noticias facilitados por las autoridades competentes.

Comunicación entre autoridades, por ejemplo, una guía técnica preparada por las autoridades para ayudar a su propio personal a responder a consultas externas o a interactuar sobre cuestiones de seguridad específicas.

Sistemas establecidos por los solicitantes de registro o las autoridades competentes para responder a las consultas de particulares.

Revistas científicas y publicaciones de organizaciones profesionales.

Sitios web o publicaciones de organizaciones de defensa del paciente.

Las interacciones con profesionales sanitarios cualificados y pacientes son una parte importante de la farmacovigilancia. Estos procesos pueden ser globales o locales. Por ejemplo, algunas clínicas y hospitales disponen de herramientas específicas para pacientes que tienen fines concretos, como recoger las opiniones y comentarios de los pacientes sobre un tratamiento aprobado para una enfermedad. Estas acciones aumentan las barreras de seguridad.

Discusiones sobre la seguridad a través de la telemedicina

La telemedicina es una herramienta que puede ayudar a los médicos a discutir y abordar la seguridad de los pacientes de diversas maneras. Aquí es la lista de algunos aspectos en los que la telemedicina puede ser beneficiosa:

Comunicación y colaboración

La telemedicina permite a los médicos comunicarse y colaborar de manera efectiva, incluso a distancia. A través de videoconferencias y plataformas de mensajería segura, los médicos pueden discutir los casos de los pacientes, intercambiar información relevante y tomar decisiones conjuntas sobre la seguridad de los pacientes. Esto facilita la coordinación entre diferentes profesionales de la salud, incluso cuando están ubicados en lugares geográficos distintos.

Segunda opinión y consulta especializada

La telemedicina brinda la posibilidad de obtener segundas opiniones y consultar a especialistas sin la necesidad de trasladarse físicamente. Los médicos pueden compartir una historia clínica, radiografías, resultados de pruebas y otros datos médicos con otros colegas a través de plataformas seguras. Esto ayuda a ampliar la perspectiva sobre el caso del paciente y permite considerar diferentes enfoques para garantizar su seguridad.

Educación y entrenamiento

La telemedicina también puede ser utilizada como una herramienta de educación y capacitación para los médicos en temas relacionados con la seguridad del paciente. A través de seminarios web, conferencias en línea y plataformas de aprendizaje a distancia, los médicos pueden acceder a recursos educativos actualizados, participar en discusiones sobre mejores prácticas y recibir capacitación en temas específicos de seguridad del paciente.

Acceso a información actualizada

Mediante la telemedicina, los médicos pueden acceder a bases de datos médicas, publicaciones científicas y otras fuentes de información actualizada sobre seguridad del paciente. Esto les permite mantenerse al día con los avances en el campo, conocer las últimas investigaciones y recomendaciones, y aplicar ese conocimiento en la atención de sus pacientes.

La magnitud del daño causado a los pacientes

Cada año, millones de pacientes sufren o mueren como consecuencia de una atención insegura o deficiente. Hay una serie de prácticas y factores de riesgo que suponen una gran amenaza para la seguridad de la atención del paciente y dan lugar a un aumento significativo de los daños derivados de la prestación de una asistencia sanitaria insegura. A continuación se ofrecen ejemplos de algunos de los errores de profesionales de la salud más comunes que provocan daños a los pacientes. El reporte de eventos adversos incluye:

Los errores de medicación son una de las principales causas de daños y perjuicios evitables en los sistemas sanitarios: las pérdidas debidas a errores de medicación se han estimado en 42.000 millones de dólares anuales. Las pérdidas asociadas a los errores de medicación se estiman en 42.000 millones de dólares anuales.

Infecciones hospitalarias, en las que 7 de cada 100 pacientes en países de ingresos altos y 10 de cada 100 pacientes en países de ingresos bajos y medios adquieren infecciones hospitalarias.

El incumplimiento de las normas de seguridad en procesos quirúrgicos causa complicaciones en casi el 25% de los pacientes. Casi 7 millones de pacientes quirúrgicos sufren complicaciones graves cada año, de los cuales 1 millón fallece durante la intervención o inmediatamente después.

El incumplimiento de las inyecciones seguras en la atención sanitaria puede provocar la transmisión de infecciones, como el VIH y las hepatitis B y C, y poner en riesgo inmediato a los pacientes y al personal sanitario. Se calcula que cada año se pierden en el mundo 9,2 millones de años de vida ajustados en función de la discapacidad.

Los errores de diagnóstico, que se producen en el tratamiento de alrededor del 5% de los pacientes ambulatorios adultos y en más de la mitad de los casos, tienen graves consecuencias. A lo largo de su vida, la mayoría de las personas experimentan errores de diagnóstico.

No realizar la transfusión de forma segura expone a los pacientes al riesgo de reacciones adversas a la transfusión y de transmisión de infecciones. Los datos sobre reacciones adversas a la transfusión de sangre en los 21 países incluidos en la muestra muestran una incidencia de 8,7 reacciones adversas graves por cada 100.000 transfusiones de componentes sanguíneos.

Los errores en el uso de técnicas de radioterapia incluyen exceder la dosis de radiación y realizar el procedimiento de radioterapia no en el tejido asignado para la irradiación. Un análisis de 30 años de datos publicados sobre la seguridad de la radioterapia reveló una tasa global de errores de 15 por 10.000 tratamientos.

La sepsis, que a menudo se diagnostica demasiado tarde, cuando ya no es posible salvar la vida del paciente. Dado que las infecciones que causan la sepsis suelen ser resistentes a los antibióticos, pueden provocar un rápido deterioro del estado clínico del paciente; se calcula que 31 millones de pacientes en todo el mundo desarrollan sepsis cada año, lo que provoca 5 millones de muertes.

La tromboembolia venosa (formación de trombos) es una de las causas más frecuentes y prevenibles de daños a los pacientes, y representa un tercio de todas las complicaciones relacionadas con la hospitalización. Se calcula que cada año se producen 3,9 millones de casos de tromboembolia venosa en los países de ingresos altos y 6 millones en los de ingresos bajos y medios.

La programa de seguridad del paciente

La seguridad del paciente en el contexto de la prestación de servicios de salud seguros y de alta calidad es esencial para fortalecer los sistemas de salud y trabajar con éxito hacia una cobertura sanitaria universal efectiva en el marco del Objetivo de Desarrollo Sostenible (Garantizar una vida sana y promover la salud y el bienestar para todos en todas las edades).

La política de Organización mundial de la salud aboga por la cobertura sanitaria universal y en particular la protección contra los riesgos financieros, el acceso a servicios de salud esenciales de calidad y el acceso a medicamentos y vacunas esenciales seguros, eficaces, asequibles y de calidad para todos. Para alcanzar este objetivo, la OMS adopta el concepto de cobertura efectiva, en el que la cobertura sanitaria universal se considera un medio para lograr mejores resultados sanitarios. También se adoptan medidas para mejorar la atención de salud y prestar servicios de calidad y seguros a los pacientes.

También es importante reconocer la importancia de la seguridad del paciente para reducir los costes asociados a la gestión de las consecuencias de los daños causados a los pacientes y mejorar el rendimiento del sistema sanitario. La prestación de servicios seguros también contribuirá a restablecer y reforzar la confianza del público en el sistema sanitario.

¡Correcta identificación de contraindicaciones vale la pena!

Es importante contar al médico si se es alérgico a un medicamento o si existe alguna contraindicación a la hora de prescribir fisioterapia por varias razones:

1. Seguridad del paciente 

Comunicar al médico acerca de cualquier alergia o contraindicación es fundamental para garantizar la seguridad del paciente. Algunas alergias pueden desencadenar reacciones graves e incluso potencialmente mortales si se administra un medicamento al que se es alérgico. Del mismo modo, ciertas condiciones médicas pueden requerir precauciones adicionales o modificaciones en el tratamiento de fisioterapia para evitar complicaciones o lesiones.

2. Elección del tratamiento adecuado

 Al informar al médico acerca de alergias o contraindicaciones, se puede seleccionar el medicamento o tratamiento de fisioterapia más apropiado y seguro para el paciente. El médico podrá considerar alternativas o ajustar el enfoque terapéutico para evitar cualquier riesgo potencial y maximizar los beneficios del tratamiento.

3. Interacciones medicamentosas

Algunas alergias o contraindicaciones pueden estar relacionadas con medicamentos que se están tomando actualmente. Es importante tener en cuenta estas interacciones medicamentosas para evitar posibles efectos adversos o reducir la eficacia del tratamiento. El médico podrá evaluar las posibles interacciones y ajustar la prescripción en consecuencia.

4. Personalización del tratamiento

Cada paciente es único y puede tener diferentes sensibilidades o necesidades de tratamiento. Al comunicar al médico acerca de aspectos claves, se facilita la personalización del tratamiento. Esto significa que el médico podrá adaptar las opciones de medicamentos o técnicas de fisioterapia para asegurarse de que se ajusten a las circunstancias individuales del paciente.

En resumen, comunicar al médico acerca de alergias a medicamentos o contraindicaciones para la fisioterapia es crucial para garantizar la seguridad del paciente, seleccionar el tratamiento adecuado, evitar interacciones medicamentosas no deseadas y personalizar la atención médica según las necesidades individuales.

Contraindicaciones generales de la fisioterapia:

Si va a recibir fisioterapia, debe informar a su médico de las enfermedades que tiene. Hay que firmar un consentimiento informado para el tratamiento. Los corrientes fisioterapia riesgos son:

  • Enfermedades sistémicas de la sangre
  • Agotamiento grave del paciente (caquexia)
  • Hipertensión en estadio III
  • Aterosclerosis grave de los vasos cerebrales
  • Es un de pacientes cardiovasculares que tiene un fase de descompensación
  • Arritmia cardiaca (fibrilación auricular, extrasístole).
  • Hemorragia (distinta de la juvenil) o su susceptibilidad
  • Estado crítico general del paciente
  • Febrícula (temperatura superior a 37,5)
  • Epilepsia con crisis frecuentes
  • Psicosis histérica
  • Enfermedades infecciosas en fase aguda
  • Nuevos tumores
  • Marcapasos
  • Contraindicaciones factoriales:
  • A la corriente continua (electroforesis):
  • Intolerancia a los factores
  • Defectos cutáneos (abrasiones, grietas, erupciones)
  • Procesos pyo-inflamatorios agudos de diversas localizaciones
  • Reacciones alérgicas al agente terapéutico administrado
  • Trastorno de la sensibilidad
  • Objetos metálicos en la zona de tratamiento
  • A la terapia de ultrasonidos y la fonoforesis
  • Enfermedades del sistema cardiovascular (cardiopatía coronaria, angina III FK, hipotensión, disfunción vegetovascular, tromboflebitis, arritmias)
  • Embarazo prematuro (exposición del tercio inferior del abdomen)
  • Procesos purulentos agudos en la zona afectada
  • Infecciones del tracto gastrointestinal (en el abdomen o la región lumbar)
  • Eccema húmedo nevus en la zona afectada
  • Glaucoma desprendimiento de retina alta miopía (actuando sobre los ojos)
  • Bronquitis y neumonía en fase de exacerbación con alergia sistémica
  • Complicaciones de la enfermedad de úlcera péptica
  • Osteoporosis
  • Terapia con magnetoláser
  • Hipotensión grave presencia de marcapasos artificial
  • Tromboflebitis
  • Nódulos tiroideos
  • Intolerancia al factor individual
  • Afección tras IAM (1-3 meses) aneurisma aórtico
  • Embarazo de cualquier edad gestacional

Conclusiones

La seguridad del paciente y las buenas prácticas son fundamentales para proteger la salud y el bienestar de las personas que reciben atención médica. Al garantizar la seguridad, se mejora la calidad de la atención, se previenen los errores médicos, se genera confianza en los servicios de salud y se ahorran costos innecesarios. La telemedicina proporciona a los médicos herramientas y recursos para discutir y abordar la seguridad de los pacientes de manera efectiva.