En muchas ocasiones tomar la decisión de adquirir una secadora depende de si creemos que tenemos o no tenemos sitio en casa para ella. Y es que en principio puede parecer que ocupa mucho espacio, pero en realidad instalarla es más fácil de lo que crees.
Son muchas las ventajas de tener una secadora en casa y por eso es un electrodoméstico cada vez más habitual en los hogares, pero debemos tener en cuenta que ocupará un espacio y que debemos instalarla en nuestro hogar atendiendo a una serie de precauciones. En realidad, instalar una secadora es mucho más sencillo de lo que en un principio parece, pero es una decisión que debemos tomar tras recapacitar y leer atentamente las recomendaciones para instalar tu secadora que incluimos a continuación.
Lo primero que debes pensar para instalar tu secadora, es que lo más recomendable es hacerlo dentro de nuestra propia casa, porque tanto los cambios importantes de temperatura, como la humedad pueden llegar a afectar a su funcionamiento y siempre es mucho mejor tenerla en un lugar en el que no le da directamente la luz del sol y no hay humedad. Si tienes hueco en la cocina, junto con la lavadora, es un lugar perfecto y además resultará muy cómodo y práctico sacar la ropa de la lavadora y a continuación introducirla en la secadora.
También el cuarto de baño puede ser un buen sitio, y por supuesto en una terraza cerrada para evitar la lluvia y otros fenómenos meteorológicos, puede ser un buen sitio. El objetivo es protegerla de las inclemencias del tiempo. Es muy común, por otra parte tenerla en una terraza descubierta, pero en una zona en la que está resguardada. Se trata muchas veces del único lugar en el hogar en el que hay sitio para ella, pero si la terraza no está aunque sea parcialmente cerrada no es recomendable colocarla allí, mucho menos si vivimos en un lugar en el que bajan mucho las temperaturas o en el que lleve de forma habitual.
Hay más recomendaciones para instalar la secadora a tener en cuenta. La temperatura ideal deberá oscilar entre los 5 y los 35ºC y por supuesto estar bien ventilada para que el aire circule por la parte trasera de la secadora. Es fundamental que haya una correcta circulación, un espacio libre tras la secadora, porque si algo obstruye la entrada de aire, el filtro está sucio o si hace mucho frío, se producirá un mayor consumo de energía y el tiempo de secado será mucho más largo. Por encima de las temperaturas recomendadas podría haber problemas también, porque ya sea por demasiado frío o demasiado calor, se alargarían los tiempos de secado y el proceso podría llegar a detenerse por temas de seguridad y para impedir que haya otros problemas.
Otra recomendación para instalar la secadora, por un asunto meramente práctico como ya desvelábamos al inicio, es colocarla junto a la lavadora. Así cuando saquemos la ropa mojada de la lavadora, la meteremos directamente a secar. Si no tenemos sitio al lado de la lavadora podemos colocarla sobre ella a modo de columna. Las secadoras son electrodomésticos poco pesados y la gran mayoría de los modelos actuales han sido diseñados para poder instalarlos en columna sobre la lavadora. En este caso, además de seguir siendo un proceso súper cómodo y práctico, ahorraremos espacio.
A modo de resumen, las tres recomendaciones para instalar una secadora más básicas son:
- lugar cerrado a temperatura entre 5 y 35ºC
- lugar bien ventilado
- al lado o encima de la lavadora.
Con estas recomendaciones para instalar la secadora, se hace más importante la necesidad de tener una en casa, porque ahora ya sabemos que el espacio no tiene por qué ser un problema.
Además las secadoras nos ofrecen una gran cantidad de ventajas. Entre ellas, destacan las siguientes:
- Cuidan de la ropa, con distintas opciones de secado en función de cada prenda.
- Ahorrarás tiempo, sobre todo en invierno y cuando llueve
- Las prendas salen casi listas, el planchado resulta mucho más sencillo.
- Ahorras espacio, porque una secadora ocupa menos que un tendedero
- Eliminas gérmenes al secar a altas temperaturas, perfecto para las personas que sufren algún tipo de alergia.