Un encofrado toda una serie de moldes, ya sean temporales o permanentes, que se utilizan en el sector de la construcción. Su objetivo es dar forma a estructuras de hormigón o a otros materiales de ese tipo, antes de que fragüen. El sistema procede de la cultura romana, ya que lo utilizaban sobre todo para construir bóvedas, arcos y cúpulas. No obstante, el concepto de enconfrado, tal y como lo conocemos hoy, surge en los años 50. No obstante, ha evolucionado mucho en estas décadas, dando lugar a sistemas modernos, flexibles y adaptados a los cambios.
Tipos habituales de encofrados.
Existen muchos tipos diferentes de encofrados, en función del uso que se le vaya a dar.
Tradicionalmente, en las obras pequeñas se utilizan piezas de madera para montar los encofrados. Su ejecución es lenta. También existe el encofrado modular, hecho a base de módulos prefabricados a base de metal o plástico. Este sistema es más rápido y seguro ya que unas piezas se ensamblas con otras hasta conseguir la estructura que deseada. También encontramos en el mercado encofrados deslizantes, que nos permite ir reutilizando las estructura a la vez que la obra sube en alturas. Justo lo contrario que el encofrado perdido, que se quedará unido para siempre a la estructura construida. Y existe también el encofrado de aluminio, que son moldes de este material que otorgan rapidez a los procesos de construcción y son utilizados, por ejemplo, en el encofrado de techos.
De todas manera, los expertos advierten que los encofrados son mucho más que simples moldes y los conciben más como estructuras en sí mismos. Por esta razón consideran que van a estar sujetas a determinadas cargas y acciones de grandes dimensiones. Es decir, que la construcción de encofrados debe tener muy en cuenta tres aspectos básicos:
La seguridad: La mayoría de accidentes en la construcción se produce porque los encofrados fallan. Bien porque deben soportar una carga excesiva, por fabricarlos con material en mal estado o por no llevar a cabo un proceso adecuado en la construcción.
Las medidas precisas y concretas: Los cálculos deben ser precisos y estar interrelacionados entre sí.
La economía del proyecto: La selección adecuada de los materiales para el encofrado y su reutilización están directamente relacionados con los costos de la construcción.
Todos estos elementos son especialmente importantes si hablamos del encofrado de techos, donde la dificultad aumenta sobre manera y es mucho más difícil calcular las medidas y las cargas.
Innovaciones en el encofrado de techos
Las empresas especializadas en ofrecer soluciones para la construcción de estructuras, no paran de investigar e innovar para mejorar la eficiencia y la seguridad de los proyectos. Y el encofrado de techos es uno de los ámbitos donde más importante es encontrar métodos y sistemas cada vez más seguros, racionales y que otorguen un mayor rendimiento a la obra.
En este sentido, encontramos en el mercado, por ejemplo, nuevos sistemas de enconfrado recuperables cuya principal aportación es que confieren ligereza y resistencia a la estructura. Este es el caso del Alumecano, que se recupera a los 3 días de hormigonar. También cabe destacar el sistema a base de Alucubetas, muy utilizado en la aparcamientos y centros comerciales, educativos o deportivos y que destaca por permitir un ahorro máximo de hormigón. Por otro lado, están las Alulosas, que permite un rápido montaje y la recuperación de casi todos los elementos. Ofrecen ligereza y resistencia. En esta lista también hay que incluir la solución Alsina Viga de Cuelgue Mecanoflex, formado por dos elementos pensados para facilitar el montaje rápido y seguro para el encofrado de techos.
Continuamos con la Viga de Cuelgue Modular, otra solución de Alsina, pensada para el encofrado de losas recuperables, rentables y seguras. Es obligatorio también hablar del Aluflex, un sistema novedoso de losas con vigas de madera. Es revolucionario porque implementa elementos mecanizados que aumentan la productividad. Destacar también el sistema Vistaform Losas, calificado de rápido y versátil, con acabado visto. Y, por último el Mecanoflex, que destaca porque aumenta la productividad en la obra y permite ahorrar en mano de obra y material.
Sin duda, todos estos son sistemas para el encofrado de techos, producto de la innovación, que tienen como objetivo hace proyectos de construcción más seguros y rentables.