¿Vive las emociones muy intensamente? ¿Para y analiza al entrar en situaciones nuevas o con gente desconocida? ¿Quiere que las cosas le salgan “bien a la primera”? ¿Se toma las cosas “muy a pecho”? ¿Le afecta mucho quedar en evidencia frente a gente importante para él o ella? ¿No lleva muy bien la crítica? ¿Se pone malo con frecuencia? ¿Es muy empátic@ y con sentido de la justicia? ¿se preocupa mucho por la muerte u otros temas trascendentales? ¿Evitas mirar películas o programas con él o ella, en donde ocurren muertes o hay abandono (Bambi, Rey León, Dumbo)? ¿Se queda por días con emociones y recuerdos de eventos que ha vivido como dramáticos? ¿Duda antes de decidir? ¿Tiene mucho miedo a la oscuridad, quedarse sol@, etc? ¿No lleva bien los cambios? ¿Se agobia en sitios con mucha gente o con muchos estímulos? ¿Se fija en los pequeños detalles? ¿Le molestan ciertos olores o texturas de la ropa?
Si tu respuesta a varias de estas preguntas es afirmativa, quizás estamos hablando de un niño o niña con Alta Sensibilidad (NAS).
La Alta Sensibilidad o Sensibilidad de Procesamiento Sensorial (SPS), es un rasgo de personalidad presente en alrededor del 20% de la población y supone una mayor sensibilidad del Sistema Nervioso Central.
No se trata de un trastorno. Es normal, solo que es distinto. Se nace con el rasgo. Es genético. No es producto de un trauma. No es simplemente timidez. A las personas que tienen este rasgo se les llama Personas Altamente Sensibles (PAS) y a los Niños Altamente Sensibles (NAS). ¿Qué caracteriza a los NAS?
Según la Dra. Aron, quien es la psicóloga e investigadora más influyente en la materia, las NAS tienen estas cuatro características principales que definen la Alta Sensibilidad:
1. Profundidad del procesamiento.
Una tendencia a parar y analizar antes de entrar en situaciones nuevas o con gente desconocida, a darle vueltas a la cabeza y analizar todo con mayor profundidad, esto facilita que anticipen más las consecuencias y se preocupen más por el futuro, pero al mismo tiempo a tener una mayor capacidad de reflexión. Much@s niñ@s con altas capacidades intelectuales también son NAS.
A continuación, de forma resumida, os dejo muchas de las maneras en que este procesamiento profundo puede expresarse en los niños y los adolescentes:
2. Reactividad emocional y Alta empatía.
Presentan una mayor intensidad emocional, tanto para las emociones agradables como para las desagradables. Algunos lo describen como una “montaña rusa de emociones” que, otras personas que no sienten así el mundo, podrían calificar como exageradas o desproporcionadas, pero que son coherentes y naturales para los NAS. Es como si tuvieran dentro de ellas un amplificador como el una guitarra eléctrica, que aumenta el volumen de las experiencias. Así mismo, presentan una gran empatía, como si se “contagiaran” con las emociones de los demás, esto las lleva a tener un alto sentido de la justicia y a preocuparse más que otros niños por temas, como por ejemplo: la defensa del medio ambiente, los animales, personas desfavorecidas, etc.
3. Sensibilidad a los detalles y sutilezas.
Las PAS tienen la capacidad para percibir sutilezas a través de los sentidos como olores, sabores, texturas e incluso en el plano visual y de procesamiento, suelen percatarse de pequeños detalles no percibidos por el resto de personas. Esto puede llevarles a destacar en alguna actividad artística o de otro tipo, además les lleva a disfrutar de las pequeñas cosas, como por ejemplo, apreciar un paseo por la naturaleza.
El cerebro de los NAS, procesa todo más profundamente, absorbe o reacciona mucho más a los estímulos de su entorno y por tanto más rápido se satura o se sobre estimula. Dando como resultado que necesite aislarse de sitios muy saturados de estímulos o con mucha gente, o que tenga una mayor necesidad de descansar luego de exponerse a estas situaciones. Cuando se encuentran saturados los NAS pueden sentirse incómodos e irritados, somatizar, llevar peor los cambios, estar más rebeldes, de peor humor, más llorones, tener dificultades para dormir, algunos de ellos pueden ponerse muy inquietos. Lo cierto es que para ellos es muy desagradable estar en este estado. Una de las formas más efectivas para salir de él, es a través del contacto con la naturaleza.
Todas estas características guardan relación entre sí.
4. Saturación o Sobre-estimulación.
¿Por qué es importante saber si eres altamente sensible?
Según las investigaciones los NAS son especialmente reactivos al entorno en el que se desarrollan, pudiendo obtener mayores beneficios que otros niños, cuando este entorno es favorable y quedando muy afectados de forma negativa cuando el entorno no lo es (Aron et al.,2005, Pluess y Belsky, 2009).
Así mismo, M Pluess y J Belsky (2013) encontraron que los NAS que habían tenido un entorno favorable en la infancia tienen menos probabilidades de desarrollar problemas de salud mental en el futuro, como la ansiedad y la depresión.
De tal manera que es muy importante que las familias y las escuelas sean conscientes de la existencia de este rasgo y actúen en consecuencia.
¿Cómo puedo saber si soy altamente sensible?
A continuación te dejo un link con un test que te ayudará a descubrirlo.
Una vez que lo sé ¿Qué puedo hacer?
Si quieres saber más acerca de que puedes hacer para aprender a gestionar tu alta sensibilidad ve al siguiente enlace.