El futuro apunta a procedimientos no invasivos, resultados naturales, medicina regenerativa e ingeniería de tejidos:
En innegable que a día de hoy la cirugía estética ofrece una abanico de opciones impensables hace tan solo una década. La tecnología avanza y lo hace en todos los sectores, siendo la medicina uno de ellos.
Gracias a estos avances en cirugía estética se consiguen tratamientos mucho más llevaderos para el paciente que además ya no están solo al alcance de unos pocos. Cada día son más las personas de a pié que se deciden por una de estas intervenciones destinadas a mejorar su apariencia y autoestima.
Con esta información es normal preguntarse ¿Cuál es el futuro de la cirugía plástica? A continuación vemos algunas teorías sobre cómo avanzará la cirugía estética:
El futuro de la cirugía plástica
Productos inyectables
La combinación de productos inyectables con novedosos tratamientos para el estiramiento de la piel y la eliminación de grasa no deseada pueden ser el fin de los procesos quirúrgicos invasivos empleados hasta la fecha.
Procedimientos no invasivos
Y es que si en algo trabaja la cirugía plástica es en ofrecer procesos que cada día resultan menos invasivos para el paciente, pues esto minimiza los riesgos, hace el tratamiento más llevadero y facilita el trabajo del profesional.
Los procedimientos no invasivos trabajan solo sobre las estructuras necesarias, provocando el menor número de traumatismos posible y simplificando los procesos. Todo ello a su vez disminuye el tiempo empleado en cada intervención y acelera la recuperación del paciente.
Medicina regenerativa
Este tipo de medicina emplea células madre para la regeneración de los diferentes tejidos del paciente. Esta ciencia progresa a pasos de gigante, gracias a la investigación clínica, la ingeniería de tejidos, la cirugía plástica y la tecnología biológica. Todo apunta a que será una pieza clave en el futuro de la cirugía plástica.
Ingeniería de tejidos
La ingeniería de tejidos permite crear estructuras físicas reales para después implantarlas en el paciente, restaurando así tanto la forma inicial como la función de dichos tejidos. Algunas de estas estructuras físicas capaces de cultivarse en laboratorio son la piel, y algo tan fascinante como la propia tráquea.
Actualización constante, una máxima en la cirugía estética
El profesional de la cirugía plástica es alguien que ama lo que hace, pues de lo contrario no podría a enfrentarse al gran reto que supone estar a la vanguardia de los últimos procedimientos médico-estéticos.
El cirujano plástico además debe ser capaz de determinar si esos nuevos tratamientos, dispositivos y productos son, sobre una base científica, efectivos para los pacientes.
Sin duda la cirugía estética avanza hacia un futuro donde se desarrollen tratamientos capaces de mejorar los resultados, minimizar los riesgos y abaratar costes en la medida de lo posible.
Actualmente la terapia con células madre nos ofrece todo un mundo de posibilidades, hasta la fecha los cirujanos debían emplear tejido del propio paciente para reconstruir zonas del cuerpo dañadas, este tejido se extraía principalmente de zonas amplias y poco visibles como la espalda o las nalgas, dando lugar a terribles cicatrices. La terapia con células madre nos permite cultivar ese tejido en un laboratorio, para después insertarlo al paciente sin más secuelas que un mejor aspecto y un aumento en su bienestar.