La custodia de los hijos, tras las separaciones y divorcios, es un problema acuciante de la sociedad española actual. Aunque la custodia compartida es, para muchos, una solución idónea y cada vez más demandada tras el fracaso de una relación de pareja, lo cierto es que su aplicación sigue siendo desigual y todavía excepcional en muchos casos.
En España, la legislación de los años ochenta otorgaba automáticamente la guarda y custodia, de los hijos menores de siete años, a la madre. La sociedad ha evolucionado de manera considerable y hoy es posible solicitar, al menos en teoría, la custodia compartida tras el divorcio. La práctica es bien distinta y sigue siendo la mujer, la que se hace con la guardia de los vástagos en gran parte de los casos.
Sin embargo, es innegable que cada vez más padres desean participar directamente del cuidado y educación de los hijos, tras la separación o el divorcio. Algunas plataformas estiman que los hombres separados se hallan en desventaja jurídica en esta materia. Asociaciones y partidos políticos están solicitando la aprobación de una normativa estatal sobre custodia compartida, que colme las demandas de muchos hombres/padres, deseosos de mantener una relación con sus hijos, en iguales condiciones que las madres.
Actualmente, existen varias normativas autonómicas sobre custodia compartida en caso de separación y divorcio. Aún así, la aplicación de las mismas sigue siendo desigual, debido a las dispares interpretaciones judiciales en unos u otros territorios. Por ejemplo: en Cataluña, los jueces aplican esta solución legal de forma preferente o prioritaria y, en sentido contrario, la custodia compartida se concede de forma excepcional en Andalucía.
José María del Río Belmonte y Carlos Moncada, jurista y periodista respectivamente, han publicado el libro Hombre separado ¿padre feliz?. La obra se adentra en la problemática y controversia de la custodia compartida. Los autores también enumeran una serie de recomendaciones, con el fin de lograr un resultado óptimo para ambas partes, en todo proceso de separación o divorcio.
Para José María del Río, la solución se halla en el acuerdo entre los dos progenitores. Según este abogado, con más de 25 años de experiencia, resulta imprescindible desdramatizar y desjudicializar la separación y el divorcio, con el objetivo de llegar a consensos beneficiosos para ambas partes.
La actual crisis económica también se percibe en este campo. Al parecer, la recesión está provocando un notable incremento de los procedimientos para la modificación de las pensiones alimenticias, debido a los cambios en el estatus económico de muchos padres separados o divorciados.
En definitiva, para ciertos sectores sociales la futura ley estatal de custodia compartida evitaría conflictos, contribuiría a la igualdad y a que los hijos dejaran de ser utilizados como moneda de cambio, tras separaciones o divorcios. Obviamente y al tratarse de una cuestión polémica, organizaciones como la Plataforma No a la Custodia Compartida Impuesta argumentan que ésta no es una medida demandada mayoritariamente por la sociedad.
El diálogo parece ser, por tanto, el camino más razonable a tomar, cuando las parejas se separan o divorcian.
FUENTES: LA OPINIÓN DE MALAGA (http://www.laopiniondemalaga.es/malaga/2012/04/10/custodia-compartida-dificil-batalla-padres/498610.html).
LA RUPTURA http://www.feriadeldivorcio.com/2012/01/22/la-custodia-compartida-sigue-su-avance-en-espana/)