‘Tik Tok’, la red social china que triunfa entre los jóvenes occidentales

La aplicación, que fue creada en 2016, en 2018 ya ha sido la ‘app’ más descargada del mundo en iPhone y sirve para una cosa tan banal como imitar a los artistas favoritos de los usuarios cantando y bailando en vídeos cortos que cuelgan para que sean comentados por el resto de usuarios de la red.

“Es la primera vez que una aplicación social china triunfa entre los usuarios occidentales”, ha destacado en declaraciones a Efe el profesor de Ciencias de la Información y de la Comunicación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), Ferran Lalueza, que pronostica que será una de las grandes novedades de 2019, cuando “seguirá creciendo con fuerza y rapidez”.

En España, ‘Tik Tok’ también cosecha éxitos entre los más jóvenes y algunos de ellos se han convertido en estrellas de la plataforma, conocidos como ‘musers’ o ‘tiktokers’, que acumulan millones de visitas y seguidores en todo el mundo.

Creada en septiembre de 2016, su empresa madre, Bytedance, compró el pasado verano la aplicación musical Musical·ly, que tenía unas características parecidas, por 800 millones de dólares y la integró en Tik Tok siguiendo, según Lalueza, una estrategia empresarial parecida a la de Facebook: mimetizar o comprar los competidores.

Lalueza sitúa la compra e integración de ‘Musical·ly’, que a pesar de ser también de origen chino estaba muy arraigada en Estados Unidos, como el “hecho determinante” del salto de ‘Tik Tok’ que le permitió entrar en el mercado occidental y crecer de forma “brutal” los últimos meses.

“Es nueva, fresca, divertida, intuitiva y resulta muy atractiva para los adolescentes, que son el segmento de público que marca tendencia”, ha destacado el experto, que, como puntos fuertes de la aplicación, añade la brevedad de los contenidos que se crean, pues “son óptimos en un entorno sobresaturado y con atención dispersa como el actual”.

Encandilar a los adolescentes

El experto ha señalado que esta red social “esta diseñada para encandilar a los adolescentes” que son, según Lalueza, el público clave en las redes sociales, el que marca tendencia y que tiene siempre a los adultos “a rebufo”.

Una pareja de salsa sonríe mientras baila. EFE Chico Sánchez

“El público adulto se lo mira con las cejas arqueadas”, señala Lalueza, que reconoce que muchos aún no la conocen o lo identifican como “una cosa de críos”.

Aún así, el profesor de la UOC pronostica que se le puede sacar más jugo con nuevas funcionalidades y si con el tiempo “al final el público adulto percibe que es la red de moda, donde hay que estar y donde encuentras lo que interesa, se hará el trasvase, ya no haciendo vídeos, sino otras cosas”.

Lalueza ha destacado que uno de los factores diferenciales de esta aplicación, en la que los usuarios aparecen entonando sus melodías favoritas, es el “buenrollismo” y “banalidad” de sus contenidos y su formato, que dificultan más la presencia o el uso de la plataforma para crear polémicas -como es el caso de Twitter- y aunque ha reconocido que puede ser cuestión de tiempo, por el momento, está libre de “troles y odiadores”.

“Hacer pronósticos en el mundo de las redes sociales siempre es muy arriesgado”, ha reconocido Lalueza, que ha recordado el caso de la aplicación Snapchat que también fue objeto de prometedores pronósticos que no cumplió tras la incorporación en Instagram y Facebook de funcionalidades similares que “la hundieron a costa de mimetizarla”.

Una situación que, según Lalueza, ‘Tik Tok’ también podría sufrir ya que hace pocos meses Facebook reaccionó con la creación de una nueva red social llamada LASSO, “una copia descaradísima” pero que “si Facebook se lo toma seriamente, le podría fastidiar”.

“China hace tiempo que intenta poner un pie en Occidente con una plataforma potente”, según Lalueza, que recuerda que el gigante asiático ya lo intentó sin éxito con la plataforma de mensajería WeChat y con la de compras Alibaba.

“Esta es la primera vez que tenemos indicios de que una iniciativa nacida y desarrollada para la cultura oriental funciona con éxito fuera de su entorno. Esto puede abrir la puerta a que más plataformas chinas intenten llegar al mercado occidental”, ha alertado el experto.

Uno de los peligros que advierte Lalueza, vinculado al uso banal y exhibicionista de la plataforma, es el uso indeseable y la infiltración que pueden hacer pederastas, pues buena parte de sus usuarios son menores, que a veces incluso están por debajo del mínimo de edad requerido, que es de trece años. EFEfuturo