Podríamos decir que la decoración con muebles de forja vuele a estar de moda, pero la realidad es que nunca ha dejado de ser tendencia para determinados ambientes y estilos de decoración. Y es que la forja tiene el valor añadido de cualquier elementos artesanal, el prestigio de lo antiguo, la belleza del arte tradicional y el encanto del metal trabajado hasta sus últimas consecuencias.
La forja, una tendencia siempre en alza.
Las modas van y vienen, pero uno de los aspectos positivos de la forja es que es capaz de versionarse hasta adaptarse a los gustos y preferencias decorativas de cada momento. La forja es la reina en ambientes rústicos o entornos rurales, pero también es un puntal en la decoración vintage, el aire retro y los espacios románticos.
Combina perfectamente con cualquier material, desde cristal a cuero pasando por madera, espejos, telas, fibras naturales o pieles. De esta manera, los muebles de forja y los elementos decorativos hechos con este material están en constante renovación, adaptándose a prácticamente todos las tendencias y estilos.
Actualmente lo ecléctico está de moda, y esto es una ventaja para la decoración de forja. Os recomendamos daros una vuelta por las redes sociales para ver la cantidad de ideas, fotografías, sugerencias e inventos que los usuarios muestran: desde originales y livianas estanterías, hasta puertas, barandillas, mesas de centro o chimeneas. Por ejemplo, si buscáis decoración de hierro forjado en Pinterest, descubriréis auténticos tesoros como botelleros y estantes de vino hechos en forja, encantadores carritos de cocina vintage u originales figuras decorativas de pared. Y todo ello, perfectamente integrado en ambientes sencillos y modernos, grandes espacios en tonos claros con suelos de parqué o interiores antiguos o rústicos realizados con un gusto exquisito y resultados de ensueño. Los muebles de forja, como comprobaréis, le dan a todos ellos el contrapunto elegante y ligero que necesitan.
Muebles de forja, un material duradero y versátil.
La forja es un material duradero y resistente que se adapta a entornos interiores y exteriores sin ningún problema. Puede ser el elemento central en un espacio de decorativo o constituirse en simples apuntes como lámparas, apliques o mesas supletorias que den el contrapunto a una decoración moderna y vanguardista. La forja también es versátil, pues se integra en cualquier espacio o estilo, incluso para dormitorios juveniles o infantiles. Una de sus principales ventajas es que aumenta su capacidad de integración en ambientes diferentes al poder cambiar su color y aspecto con pinturas para metal. El resultado es sorprendente, otorgando un aspecto renovado e innovador a los muebles de forja más antiguos o desfasados. Por otro lado, su mantenimiento es, además, fácil y rápido ya que se limpia con un paño húmedo.
Tanto es así, que es un material muy utilizado antes, ahora y siempre para decorar cuartos de baño. Son resistentes a la humedad y ofrecen mil soluciones para toalleros, portarrollos, estantes, apliques, perchas o espejos. En todos los estilos y espacios, los muebles de forja para el baño son una tendencia a tener muy en cuenta.
El valor decorativo de los muebles de forja.
A veces resulta difícil asimilar que un material como la forja, pesado, frío y oscuro, pueda convertirse en un elemento ligero, leve, sensual, romántico y elegante. Pero lo cierto es que lo consigue. Los artesanos de la forja guardan auténticos tesoros escondidos en sus fraguas, sobre todo pequeñas dosis de magia para convertir el metal en bellos elementos decorativos y bien modelados. Y pueden construir sobre el yunque muebles de jardín, cabeceros de cama, elaboradas rejas, o elementos escuetos y ligeros de formas caprichosas. Muebles de forja para todos los gustos y necesidades.
Por otro lado, el vacío de la forja ofrece una sensación visual y emocional de espacio libre y abierto. Los diseños de forja que hoy son tendencia han abandonado las antiguas torsiones del modelado para priorizar las superficies planas, las formas geométricas y los diseños creados en ordenador y plasmados después a fuego en el taller. También hay innovación en el taller del forjador, que ya utiliza modernos métodos de corte con láser y otras tecnologías de vanguardia.
En cuanto a los colores, la tendencia actual prima el blanco, el gris y el negro, así como los tonos metalizados, tanto en oro y plata como en bronce. Y dependiendo del estilo, estos pueden ser mates o satinados, pero siempre ideales para dar la nota de color y el toque de distinción a un ambiente concreto.